Por fin están publicando en Microsiervos la clasificación de las 10 series más geek, según la votación que realizaron a principios de enero. La verdad es que, a falta sólo de la más geek entre las geek, la lista aviva nuestra nostalgia de una manera difícil de explicar, y a veces por razones de lo más peregrino: esas patillas del capitán Kirk, ese Homer tan inútil y, a la vez, con un lado hippy setentero de lo más entrañable, esa tensión sexual que podía cortarse con un cuchillo entre Mulder y Scully (eso era química de la que pocas veces se ve en la tele), esas tabletas de chocolate de MacGyver, esos números chungos de Hurley... Merece la pena echarle un vistazo a la lista, porque resulta un compendio de televisión friki, sí, pero en su mayoría bien hecha y que no toma a los espectadores por tontos.
En las candidatas (que eran muchísimas más) había también títulos tan añorados como "Cuentos del mono de oro" o "El gran héroe americano", un verdadero icono pop aunque poca gente se acuerde de ella. Incluso el inefable Michael Moore la "homenajeó" en "Fahrenheit 9/11" al incluir su tema principal como banda sonora del aterrizaje, a bordo de un caza, de George W. Bush en un portaaviones para anunciar que la guerra de Irak había "terminado".
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